Reclama 60.000€ de indemnización por daños causados durante una cirugía

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En la Sentencia analizada, el paciente reclama una indemnización por los daños causados derivados de una supuesta negligencia médica en una cirugía. En esta intervención se le produjo una luxación irreductible en la articulación temporomandibular.

El paciente manifestaba que tras acudir a la primera consulta odontológica presentaba fuertes dolores en la articulación temporomandibular que le impedían la masticación. Como consecuencia, de la colocación de implantes para después realizar un tratamiento protésico de rehabilitación mediante puentes, el paciente precisó de tratamiento medicamentoso con relajantes y calmantes ante la situación de malestar generada por los fuertes dolores en la mandíbula, llegando incluso al servicio de salud mental del hospital.

El paciente reclama indemnización por daños causados

Tras esta situación, el paciente acudió a otras clínicas dentales donde le recomendaron la extracción de las cuatro muelas del juicio y la retirada de los implantes, a lo que el paciente finalmente decidió someterse. Por ello el paciente solicitaba una indemnización que ascendía a más de 60.000€.

Por parte de la defensa del Doctor demandado, alegó las patologías previas del paciente. Especialmente, los problemas de articulación temporomandibular y sus problemas psiquiátricos, que tenían lugar desde antes de la realización del tratamiento odontológico. Además, se puso de manifiesto que el estado bucodental del paciente no era adecuado ni correcto. De hecho, el tratamiento tenía una finalidad funcional y, por ende, no estética. Asimismo, en el cuestionario de salud que firmó el paciente antes de iniciar su tratamiento odontológico, dejó referido que padecía un trastorno adaptativo mixto ansioso-depresivo. A mayor abundamiento, se aportó el Consentimiento Informado, que recogía además de la técnica realizada, las complicaciones inherentes y derivadas del tratamiento, tales como problemas de adaptación a la prótesis.

La intervención se desarrolló correctamente y durante la fase de seguimiento y tratamiento de esta, el paciente decidió abandonar el tratamiento, para ponerse en manos de otra clínica con la consecuente interrupción del nexo causal.

Negligencias médicas y reclamaciones

La intervención se realizó correctamente y durante la fase de seguimiento el paciente decidió abandonar el tratamiento

El Juez determinó en su Sentencia que el médico en su ejercicio profesional es libre para escoger la solución más beneficiosa para el bienestar del paciente, poniendo a su alcance los recursos que le parezcan más eficaces en todo acto o tratamiento que decide llevar a cabo. Siempre y cuando, sean generalmente aceptados por la Ciencia médica o susceptibles de discusión científica. De acuerdo, con los riesgos inherentes al acto médico que practica en cuanto está comprometido una obligación de medios en la consecución de un diagnóstico que tiene como destinatario la vida, la integridad humana y la preservación de la salud del paciente. De la misma manera, se expuso en la Sentencia que la representación del paciente no probó que la actuación del demandado fuera negligente. Tampoco se probó que no actuara conforme al protocolo.

Al margen de lo anterior, el paciente estaba informado adecuadamente de los procedimientos a los que se iba a someter, tal y como acabó probándose. El estado bucodental previo era patológico y tratado mediante prótesis previa. Asimismo, se llevó un adecuado seguimiento en consulta, intentando el doctor mejorar la situación oclusal del paciente mediante el ajuste de las coronas. De hecho, en la última consulta le retocan la articulación, tal y como recomiendan desde el Hospital. Sin embargo, el paciente no acude posteriormente a las consultas, ya que decide de forma unilateral continuar el tratamiento desde otra consulta.

El paciente estaba informado adecuadamente de los procedimientos a los que se iba a someter

Consecuentemente, el Juez establece que al no haberse acreditado ninguna negligencia médica no ha lugar a la indemnización pretendida por la paciente, ascendente a más de 60.000€. Además, condenó en costas a la parte actora y absolviendo al doctor de todos los pedimentos de la demanda.

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