Unas 45.000 enfermeras solicitan la jubilación anticipada

Un grupo de unas 45.000 enfermeras se han acogido a la solicitud de jubilación anticipada llevada a cabo ante el Ministerio de Seguridad Social. Este movimiento llega tras la solicitud del Sindicato de Enfermería, que, en 2021, impulsó debido a las condiciones laborales de las enfermeras. Además, alegaron, a través de un estudio, que estas afectaban tanto a la salud de las profesionales como a la atención que podían brindar a los pacientes.

Tras el papel fundamental que realizó el gremio durante la pandemia de la Covid-19, el sindicato considera un agravio la negativa a la jubilación anticipada en Enfermería. Además, presionan para establecer un coeficiente reductor de la edad de jubilación para las enfermeras.

El EIR tardaría en reponer esta jubilación de enfermeras más de dos décadas

Una hipotética jubilación anticipada de unas 45 mil enfermeras supondría la baja de más de un 10% de la plantilla en España, sumando tanto en el sector público como en el privado. Además, a través del EIR -manteniendo las nuevas plazas en unas 2.000-, la reposición de estas bajas tardaría más de dos décadas en lograrse. Sin tener en cuenta el número de jubilaciones ordinarias que se fuesen produciendo durante el trascurso de los años.

Problemas de salud y en la atención de las enfermeras

El estrés laboral puede tener un impacto significativo en el desempeño de las enfermeras. Dado que el trabajo de enfermería implica una alta carga de responsabilidad y presión, el estrés puede afectar de diversas maneras:

• Error en la toma de decisiones. El estrés crónico puede afectar la capacidad de tomar decisiones adecuadas y precisas, lo que es esencial en la atención médica. Los errores en la administración de medicamentos, el seguimiento de protocolos o la respuesta a situaciones de emergencia pueden poner en riesgo la seguridad de los pacientes.
• Fatiga física y mental. Las enfermeras a menudo trabajan largas horas en turnos rotativos, lo que puede llevar a la fatiga física y mental. El estrés prolongado puede aumentar esta fatiga y disminuir la capacidad de mantenerse alerta y concentrado en el trabajo.
• Deterioro en la calidad de la atención. El estrés puede llevar a la disminución de la calidad de la atención al paciente. Las enfermeras pueden volverse menos atentas a las necesidades de los pacientes, lo que podría resultar en retrasos en la atención, falta de empatía o comunicación deficiente.
• Agotamiento emocional. El estrés laboral crónico puede llevar al agotamiento emocional, lo que dificulta el manejo de situaciones emocionalmente desafiantes, como la muerte de pacientes o la interacción con familias angustiadas. Esto puede agotar la empatía y la capacidad de proporcionar apoyo emocional.

Además, los problemas no solo afectan a los pacientes, sino a la propia salud de las enfermeras. El estrés constante puede tener efectos negativos en la salud física y mental de las enfermeras, lo que a su vez puede aumentar las tasas de absentismo laboral y reducir la calidad del trabajo. Los problemas de salud pueden incluir desde trastornos del sueño hasta problemas cardiovasculares y problemas de salud mental, como la ansiedad y la depresión.

El seguro de salud de los médicos

El estrés laboral se encuentra presente en la profesión médica, más allá de las diferentes enfermedades a las que estamos expuestos toda la población. Por ello, es fundamental que los médicos contemos con nuestro seguro de salud privado, que nos permita acceder a especialistas sin aguantar largas colas de espera.

Uniteco, con más de 50 años de experiencia y especialización en el sector de la salud, es consciente de esta realidad. Por ello, contamos con el seguro de salud que mejor se adapta a las necesidades de nuestros profesionales sanitarios.